Las autoridades estadounidenses han iniciado una investigación sobre los sistemas de conducción autónoma de Tesla después de varios accidentes, incluida la muerte de un peatón en Arizona. La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) está examinando cuatro incidentes en los que vehículos de Tesla colisionaron en condiciones de baja visibilidad, como sol intenso, niebla y polvo.
Esta investigación se produce tras el reciente lanzamiento del robotaxi Cybercab por parte de Tesla. A diferencia de otros sistemas de conducción autónoma que emplean sensores LiDAR o radares, Tesla confía exclusivamente en cámaras y algoritmos de inteligencia artificial para la navegación de sus vehículos. Esta decisión podría influir en el rendimiento del sistema en situaciones de visibilidad reducida.
La NHTSA evaluará la capacidad del sistema Full Self-Driving (FSD) de Tesla para manejar estas condiciones y revisará cualquier actualización implementada por la empresa. Tesla se ha enfrentado anteriormente a desafíos similares, incluyendo retiradas de vehículos debido a fallos en su sistema de asistencia al conductor.
